Celebramos el Día Internacional del Taijiquan: Una jornada de unión, energía y respeto

Longhun
29 abr
2 Min. de lectura

El pasado domingo vivimos una jornada inolvidable con motivo del Día Internacional del Taijiquan, una fecha que nos invita no solo a practicar, sino también a reflexionar sobre el legado, la comunidad y el espíritu que rodea este arte milenario.

Desde las 10:00 de la mañana, el lugar se fue llenando de energía y sonrisas. Más de 80 personas llegaron para compartir una práctica abierta, guiada por profesores de distintas escuelas que unieron sus conocimientos y linajes para ofrecer una experiencia integral, profunda y respetuosa.

Un inicio cargado de intención

La jornada comenzó con un saludo marcial y palabras de apertura, donde tuvimos la oportunidad de presentar a los profesores y sus respectivos linajes. Este gesto, sencillo pero lleno de significado, marcó el tono de todo el encuentro: reconocimiento mutuo, humildad y compromiso con el arte.

Posteriormente, compartimos una breve introducción sobre el Taijiquan, sus orígenes y su relevancia en la vida contemporánea, conectando la historia con la práctica actual.

Práctica guiada: cuerpo, respiración y presencia

La práctica estuvo dividida en bloques complementarios:

Automasaje y movilización articular, de la mano del profesor Cristóbal Troncoso, prepararon nuestros cuerpos y sentidos para un trabajo más profundo.
Luego, el profesor Cristian Vilchez nos introdujo al Zhanzhuang y al hilado de seda del estilo Chen, con una guía clara que nos permitió experimentar la conexión interna y la continuidad del movimiento.
A continuación, retomamos con Aznous Boisseranc, quien presentó los 8 métodos de regulación de la respiración, conectando el aliento con la estructura y la atención.
El cierre técnico estuvo a cargo de Cristóbal Cortese, con una síntesis de los 5 pilares del Zhanzhuang y una refinación de la respiración como eje estructural y energético.

Un cierre que nos dejó con el corazón lleno

Al final, compartimos unas palabras entre todos los profesores, agradeciendo la participación, el respeto mutuo y la vibración colectiva que se generó. La fotografía grupal fue solo una forma de sellar lo que ya estaba instalado en el aire: una sensación de comunidad real, sin etiquetas ni jerarquías, donde cada persona, sin importar su escuela o nivel, aportó algo al encuentro.

Agradecimientos sinceros

Queremos dar un agradecimiento especial a:

Los profesores invitados, que compartieron generosamente su experiencia.
Los estudiantes, que llegaron con apertura y respeto.
Quienes ayudaron a registrar el evento con fotos que ya están circulando y que nos permitirán revivir este día por mucho tiempo.
Y a los maestros destacados que nos honraron con su visita, dejando en claro que sí es posible construir desde el respeto y el apoyo mutuo.

Mirando hacia el futuro

Este Día Internacional del Taijiquan no solo fue una celebración, sino también una afirmación: el Taijiquan está vivo, se practica con seriedad, y puede unir a personas muy distintas bajo un mismo espíritu.

Con esperanza y motivación, ya comenzamos a soñar con una nueva edición del evento para el próximo año. Sabemos que aún hay mucho por hacer, y también que cuando se trabaja con respeto, entrega y visión, los frutos florecen de manera natural.